Guatemaltecos conocieron hace diez años magnitud del "horror" de la guerra

AFP/Univisión
25/02/09

Hace una década, los guatemaltecos quedaron impactados al conocer la magnitud de la guerra civil que ensangrentó al país durante 36 años, al ser publicado el informe Memoria del Silencio, que confirmó casos de genocidio, torturas, 200.000 muertos y desaparecidos y 669 masacres.

El informe de la Comisión para el Esclarecimiento Histórico, auspiciada por la ONU, fue presentado el 25 de de febrero de 1999 por el experto alemán Christian Toumoschat, quien reconoció que "con profundo dolor conocieron la extrema crueldad con que se perpetraron muchas de las violaciones registradas".

En esa ocasión también afirmó "como la gran cantidad de niñas y niños, (fueron) víctimas de actos crueles y asesinatos, y el ensañamientos en contra de las mujeres, especialmente en contra de mujeres mayas, torturadas, violadas sexualmente y asesinadas".

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La Comisión estableció que las fuerzas del Estado y grupos paramilitares de derecha fueron responsables del 93% de las violaciones documentadas, las fuerzas insurgentes cometieron el 3%, mientras que el restante 4% fueron otros actores que no pudieron ser establecidos.

Asimismo, "la Comisión concluye que, en el marco de las operaciones contrainsurgentes realizadas entre 1981 y 1983, en ciertas regiones del país, agentes del Estado de Guatemala cometieron actos de genocidio en contra de grupos del pueblo maya", que son el 42% de los 13 millones de habitantes.

Según el documento, los pueblos indígenas sufrieron el 83,33% de las víctimas y los mestizos 16,51%.

También se "pudo comprobar" como Estados Unidos ayudó al Estado para "mantener la arcaica e injusta estructura socioeconómica del país", mientras que Cuba ayudó a la ex guerrilla izquierdista en la "formación militar de combatientes".

Para sanar las heridas, la Comisión hizo 84 recomendaciones al Estado, como buscar a desaparecidos, un programa nacional de reparación, que incluyera la dignificación de la memoria de las víctimas, resarcimiento y la divulgación de la historia del enfrentamiento.

Sin embargo, la gran mayoría no se ha cumplido.

El informe documentó testimonios desgarradores de familiares de víctimas de operaciones del Ejército, que durante la guerra "diseñó e implementó una estrategia para provocar terror en la población" y se necesitará "tiempo, esfuerzo y experiencias para superarlos".