Retrospectiva - El suicida de la ropa interior – Aplastando la libertad con la farsa del terrorismo árabe

Joe Quinn
SOTT.net
Traducción por el Averiguador
31/12/2009


Aunque parezca extraño, hace un par de semanas mientras reflexionaba sobre la promesa incumplida de Obama de regresar las tropas a casa, su intento por alejarse de la postura belicista de la administración Bush y la caída en picada de su popularidad, me dije: “sabes, lo que este tipo (o en realidad el disgustado público americano) necesita, es buen ‘ataque terrorista musulmán’ a la vieja usanza. Preferentemente uno que incluya un temible mensaje ‘terrorista’ sobre Afganistán y sobre ‘masacrar infieles’. ¡Esto pronto silenciará a las masas y las alineará detrás de la locura afgana de Obama!

...Siga leyendo, haciendo click en el título...


Y así fue, mientras bebía mi ponche de huevo en Navidad, quedé impactado y poco sorprendido al leer los titulares sobre una ‘bomba en ropa interior’ (como se ve arriba).

Para hablar con propiedad del reciente ‘ataque terrorista’ aéreo en Detroit y los ataques terroristas aéreos en Yemen debemos adentrarnos en el tumultuoso mundo de la ‘guerra contra el terrorismo’, donde lo negro es blanco, donde arriba es abajo, y donde los hombres bronceados con rasgos del medio oriente y tus bragas marcan igual en el medidor de amenaza del Departamento de Seguridad Nacional norteamericano. En resumen, no es una tarea fácil. Entonces, antes que nada, déjenme decir unas cuantas palabras sobre los aeropuertos y sus viejas y nuevas ‘medidas de seguridad’.

La pesadilla de los vuelos comerciales modernos comenzó con el 9/11. Antes de esta fecha, viajar por aire era razonablemente civilizado. No había grandes demoras (al menos no luego del check in). Tan solo arrojábamos nuestro equipaje en la cinta de seguridad, atravesábamos el escáner y listo.

Sin embargo, después del 9/11, todo avión comercial se convirtió en una bomba potencial y los pasajeros y su equipaje de mano tuvieron que pasar por inspecciones más profundas. En diciembre del 2001, los dramas teatrales del evidente lavado del cerebro Richard Reid, llamado “el suicida de los zapatos”, agregó al zapato común, o de jardinería, a la lista de potenciales armas terroristas. Ahora, los comportamientos igualmente extraños del joven nigeriano Umar Farouk Abdulmutallab ha arrojado nuestra ropa interior a la ensalada.

Tanto el suicida de los zapatos como el de las bragas intentaron utilizar PETN (un explosivo militar) en sus respectivos vuelos. Como resultado de ello, ahora nuestros zapatos deben pasar por los escáneres en los aeropuertos y solo puedo suponer que se llevarán a cabo más escaneos invasivos y obligatorios de nuestras partes bajas en un supuesto esfuerzo por prevenir más ataques de ropa interior. Sin embargo, el problema es este:

El PETN, sea guardado en zapatos o pegado en cualquier parte del cuerpo, no puede ser detectado por los escáneres de los aeropuertos. Se necesita de un análisis químico. A menos que las autoridades planeen reconfigurar drásticamente la cantidad y disponibilidad de los vuelos internacionales, no existe posibilidad que se puedan introducir análisis químicos para cada pasajero. Por lo tanto, llegamos a nuestra primera tentativa de conclusión: que los miles de millones de zapatos que han sido escaneados en los aeropuertos desde el 2001, y los miles de millones de ropa interior que de ahora en adelante se volverán objetos de escrutinio oficial, no tienen ni tendrán nada que ver con la seguridad en aeropuertos ni con prevenir el terrorismo.

¿Entonces de qué se trata todo esto?

Mientras metafóricamente camino a través de las grandes pilas de estiércol que constituyen la materia prima de la historia oficial del último ‘ataque terrorista’.

El suicida de la ropa interior del día de Navidad no fue el habitual árabe furioso ni un ayudante musulmán de baja escala. Se trata del hijo del magnate bancario y ex ministro del gobierno nigeriano, Alhaji Umaru Mutallab, uno de los hombres más ricos de África. Aquí estamos hablando de la élite colonial africana, una versión africana de la “red de antiguos colegas” británica. Mientras en Londres, su hijo, el suicida de la ropa interior, vivía en un departamento de ₤4 millones sobre la calle Mansfield, en la ciudad de West End.


El “terrorista” Mutallab (al centro) con
sus jóvenes y aterradores amigos

También disfrutaba del acceso a visas para varios países, incluyendo EEUU.

Por lo tanto, no es sorprendente descubrir que aparentemente el suicida haya recibido tratamiento especial en el aeropuerto de Ámsterdam antes de tomar el vuelo a Detroit. El testigo Kurt Haskell informó que un hombre hindú elegantemente vestido lo escoltó hasta la puerta de embarque e informó a quien atendía que el suicida de la ropa interior no tenía pasaporte pero que necesitaba tomar el vuelo. El hombre vestido elegantemente le dijo que tendría que hablar con el encargado, lo cual aparentemente hizo, y exitosamente pudo subir abordo al ‘terrorista’.

Ahora, esto requiere de un serio movimiento de hilos, y todo el alboroto de la prensa sobre si el sistema de seguridad funcionó o no es tan solo una farsa, ya que si el suicida de la ropa interior apareció en la puerta de embarque sin el pasaporte, es poco probable que haya llegado hasta ese punto mediante el proceso habitual, incluyendo el check-in, el cual requiere que los pasajeros muestren sus pasaportes. De todas maneras fue escoltado como VIP hasta la puerta de embarque por el hombre elegante. ¿Entonces cómo es que dos sospechosos de terroristas, al menos uno de ellos sin pasaporte, llegan hasta la puerta de embarque en un aeropuerto y luego logran subirse al avión? La respuesta es que nunca podrían haberlo hecho a menos que posean cierta credencial diplomática o contactos de alto nivel en el aeropuerto.

¿Adivinen quién maneja la seguridad del aeropuerto Schipol de Amsterdam? ¡ICTS por supuesto! La misma compañía de seguridad israelí que de alguna manera se las arregló para permitir que el suicida de los zapatos abordara su vuelo en Miami en el 2001 y a varios de aquellos míticos secuestradores que supuestamente volaron desde el aeropuerto Logan de Boston el 11 de septiembre del 2001. También es útil recordar que el suicida de los zapatos pasó por la seguridad de ICTS y de El Al en el aeropuerto de Ámsterdam tomando un vuelo a Tel Aviv en julio del 2001 en lo que aparentemente fue un viaje de una semana con todos los gastos pagos a la ciudad israelí. Qué fue a hacer precisamente allí continúa siendo un misterio.

Todo esto nos lleva a nuestra segunda tentativa de conclusión:

El suicida de la ropa interior y su compañero no eran terroristas. Por supuesto, todo depende de quien creas tú que son los verdaderos terroristas...

Respecto a la bomba, como se ha mencionado, era de PETN, o Pentaeritritol, un elemento para la creación de PETN. Para fabricar PETN, el Pentaeritritol debe mezclarse con ácido nítrico y sulfúrico concentrados. Se supone que estos ácidos estaban en la jeringa que el suicida intentaba inyectar, bajo una manta, en su ropa interior. Luego intentó encender el preparado de PETN con alguna clase de fusible. Aparentemente no estaba al tanto que el PETN requiere una onda de choque en lugar de calor o fuego para detonarse, y una onda de choque se produce de mejor manera con un explosivo iniciador. En resumen, toda la empresa estaba condenada al fracaso desde el principio. Ya que el suicida y su inteligentemente vestido compañero fueron capaces de pasar las puertas sin pasaportes, y que es poco probable que hayan podido atravesar la seguridad, nos queda preguntarnos porqué el suicida no llevó un explosivo que necesitara una preparación mucho menor, como por ejemplo media dinamita. Aquí tenemos un breve video de lo que puede hacer media dinamita en una cabina.

En consecuencia, la tentativa de conclusión número tres es que el objetivo no era realmente ‘asesinar infieles’ sino reforzar el concepto de ‘terrorismo musulmán’. De hecho, parece claro a esta altura que la combinación de terrorismo y vuelos comerciales es una táctica bien definida para maximizar el temor por parte de los verdaderos maestros del terrorismo. Después de todo, es difícil pensar en un lugar donde el ciudadano promedio se sienta más vulnerable que en un tubo de metal a 35.000 pies de altura. Agrega a eso un enloquecido ‘terrorista’ y ya tienes las condiciones psicológicas óptimas para una programación basada en el temor.

Sin embargo, en este caso particular, el suicida de la ropa interior estaba lejos de estar enloquecido. Según el primer pasajero que intentó subyugar a Mutallab en el avión, este no ofreció resistencia y fue obediente. Según el cineasta holandés, Jasper Schuringa, él estaba “mirando a la nada”. Schuringa también notó que Mutallab estaba prendido fuego pero no exhibió ningún tipo de reacción. Esto es sugestivo de una persona en cierta clase de trace. Efectivamente, Schuringa lo declaró explícitamente en esta entrevista pero inmediatamente continuo con las palabras, “No quiero hablar de ello”.

Que extraño.

Igualmente extraño es el relato de Schuringa sobre la forma en que redujo a Mutallab:

"Mientras el avión se acercaba a su destino en Detroit, Michigan, escuchamos un ruido similar al de un petardo, y alguien comenzó a gritar: “¡Fuego! ¡Fuego!”

“Unos 30 segundos después el humo comenzó a cubrir el lado izquierdo debajo de esta persona”, dijo.

“Básicamente reaccioné directamente. Ni lo pensé”.

Saltó sobre el pasajero a su lado y alcanzó el asiento de Abdulmutallab, “Porque pensé que pretendía hacer explotar el avión, e intentaba buscar explosivos en su cuerpo”.

“Le saqué el objeto que tenía e intenté extinguir el fuego con mis manos y luego lo arrojé”.

“Solo para asegurarme lo tomamos junto con otro pasajero y lo llevamos a la primera clase y allí lo desnudamos y lo mantuvimos esposado asegurándonos que no tuviera más armas o bombas”

“Todo el avión estaba gritando. El sospechoso no dijo ni una sola palabra”.

Schuringa dijo que otros pasajeros lo aplaudieron mientras volvía a su asiento."

Las reacciones de los demás pasajeros parecen normales. Las reacciones de Schuringa son reminiscentes de alguien que ha sido entrenado en tácticas anti-terrorismo en aviones.


Imagen de Mutallab desde la cámara de Jasper Schuringa mientras es retirado del avión.


Según los informes, Schuringa estaba en camino a visitar a un ‘amigo israelí’, Shai Ben-Ami, quien es propietario de un restaurante en Miami. El vuelo aterrizó al mediodía del día de navidad, y para esa misma noche Ben-Ami se había convertido en el improvisado manager de relaciones públicas de Schuringa, negociando agresivamente tarifas para entrevistas y por el par de imágenes que Schuringa había tomado a Mutallab con su teléfono móvil mientras era bajado del avión.

Los testigos en el vuelo también informaron que luego que Mutallab fuera bajado del avión el FBI arrestó a otro individuo de rasgos hindúes en el aeropuerto de Detroit. Desde aquel entonces el FBI negó la participación de alguien más.

Patricia Keepman iba en el vuelo con su esposo, hija, y dos nuevos hijos adoptados en Etiopía. Ella declaró que estaban sentados 20 filas detrás de Mutallab. Su hija dijo que delante de ellos había un hombre que grabó toda la pelea en video, incluyendo el intento de detonación. “Se levanto y filmó toda la secuencia, de manera muy relajada”, dijo Patricia. “Sabemos que el FBI lo está buscando intensamente. Desde entonces, no escuchamos más nada al respecto”.


El pasajero del vuelo 253 Kurt Haskell y su esposa


El pasajero Kurt Haskell también informó que un tercer hindú fue arrestado luego que el avión aterrizara en el aeropuerto de Detroit. Haskell también declara que desde aquel momento ha sido visitado por el FBI en lo que parece ser un intento por silenciarlo respecto a su declaración de un tercer individuo.

Según la CNN, el padre del suicida de la ropa interior contactó recientemente a la embajada norteamericana en Nigeria preocupado porque su hijo estaba planeando algo, y que se había “radicalizado”. Aparentemente, sus súplicas cayeron en oídos sordos.

Casualmente, la Orwelliana Acta Patriota, aprobada luego de los ataques del 11 de septiembre, está en el tapete para su renovación o para su eliminación en un par de semanas. Que buena suerte para Obama, que secretamente está muy interesado en tales poderes draconianos, que justo haya sucedido el episodio del suicida de la ropa interior, ya que ahora existe una muy buena posibilidad que el Acta Patriota no solo sea renovada con entusiasmo, sino por unanimidad.

Sin embargo, no hay posibilidad que alguno de estos problemáticos detalles sean debatidos por los principales medios, ya que ninguno de ellos son relevantes respecto a la historia que los gobiernos de EEUU e Israel quieren hacernos creer: ¡que Yemen apoya a “al-qaeda”!

Yendo a lo global

Inicialmente, lo único que teníamos era a un joven nigeriano y un infructuoso esfuerzo por detonar lo que nos han dicho que era un componente explosivo. Sin embargo, en las primeras 24 horas, IntelCenter, un grupo de ex autoridades militares y de inteligencia norteamericanas, quienes con los años se las han arreglado de alguna manera para producir muchos de los videos y mensajes de “al-Qaeda” que son descubiertos por casualidad en “sitios web jihadistas”, produjeron una imagen de Mutallab con lo que ellos dicen ser una bandera del brazo mediático de “al-Qaeda en la Península Árabe” y un mensaje proveniente del grupo señalando a Mutallab como a uno de los suyos:

“Le decimos al pueblo americano que desde que apoyan a los líderes que asesinan a nuestras mujeres y niños…los tendremos que masacrar y los golpearemos sin previo aviso, nuestra venganza está cerca”, decía el comunicado

¿Todavía no estás asustado? Bueno, la gente de Intelcenter realmente espera que lo estés. Invierten mucho esfuerzo en producir estos mensajes y videos e imágenes. Por ejemplo, un video de ‘al-Qaeda’ del 2006 en el que aparece al-Zawahiri, realizado por Intelcenter, fue analizado por Neal Krawetz, investigador y consultor en seguridad informática. Durante una presentación que hizo en la conferencia de seguridad BlackHat en Las Vegas en el 2007 sobre el análisis, alteración y mejoras de fotografías digitales e imágenes de video, Krawetz mostró que el video había sido modificado de una forma muy interesante.

Utilizando un programa que él escribió (y que entregó en CD-ROM en la conferencia) Krawetz pudo imprimir las tablas de cuantización en un archivo JPEG (eso indica de qué manera fue comprimida la imagen) y determinar la última herramienta que generó la imagen – es decir, el fabricante y modelo de la cámara si la imagen es original o la versión de Photoshop que fue utilizada para alterar y guardar nuevamente la imagen.


Una imagen del video fraudulento de
“al-Qaeda” producido por Intelcenter

Krawetz tomó una imagen (arriba) del video de al-Zawahiri del 2006 mostrando al parecido del Sr Magoo sentado delante de un escritorio y con un cartel escrito. Luego de exponer su análisis de errores, Krawetz pudo determinar que el mensaje en el cartel detrás de la cabeza de al-Zawahiri fue agregado a la imagen al igual que el logo de IntelCenter, productor del video. En resumen, parece muy probable que IntelCenter haya producido de la nada el mensaje del cartel, y probablemente el video completo.

A pesar de esta evidencia, ¡nos piden creer que el último mensaje y fotografía de ‘al-Qaeda en la Península Arábica’ que IntelCenter acaba de descubrir en un “foro jihadista en Internet”, y que conecta a Mutallab con 'al-Qaeda en Yemen', es auténtica!


Imagen de Mutallab con el 'logo de al-qaeda'
procurado (¿fabricado?) por Intelcenter

El gobierno de Yemen, o su dictadura, sumó su voz al fraude declarando que Mutallab estuvo en Yemen desde agosto a diciembre del 2009. Deshonestas publicaciones de Internet, habitualmente por parte de ‘sitios Web jihadistas’ quieren hacernos creer que él le estaba haciendo los toques finales a su bomba de ropa interior bajo la tutela de “al-Qaeda en la Península Arábica” y específicamente Anwar al-Awlaki, el estudioso musulmán nacido en EEUU, líder espiritual, y ex imán. El mismo al-Awlaki que supuestamente tenía contacto con el chivo expiatorio de Fort Hood mentalmente programado, Nidal Malik Hasan. El mismo al-Awlaki que supuestamente era el consejero espiritual de dos de los suicidas del 9/11. ¿No es fabuloso cómo todo se conecta en una gigante red de ‘terrorismo musulmán’ que comienza con el 9/11?

El hecho es, que todo comienza con el 9/11 y la evidencia que los ataques del 9/11 fueron perpetrados por elementos de los gobiernos de EEUU y de Israel es tan abundante que no es necesaria una mayor discusión. De qué forma Mutallab realmente pasó su tiempo en Yemen está, sin embargo, todavía abierto al debate, y siempre es preferible la especulación cuando existe información razonablemente objetiva que la apoye. Como por ejemplo:

"Yemen desbarata célula con ‘lazos con Israel’
Martes, 7 de octubre, 2008
Noticias BBC

El presidente yemení, Ali Abdullah Saleh, informó que las fuerzas de seguridad han arrestado a un grupo de supuestos militantes islámicos relacionados con la inteligencia israelí.

El Sr Saleh no detalló la evidencia descubierta para demostrar los lazos del grupo con Israel, enemigo regional de Yemen.

Los arrestos estuvieron relacionados con el ataque a la embajada norteamericana en Sanaa el mes pasado que acabó con la vida de unas 18 personas, según informaron fuentes oficiales.

El ministro de relaciones exteriores de Israel ha rechazado la acusación como “totalmente ridícula”.

“Una célula terrorista fue arrestada y será entregada a las autoridades judiciales por sus conexiones con los servicios de inteligencia israelíes”, dijo el Sr. Saleh en un encuentro en la Universidad al-Mukalla en la provincial de Hadramawt.

“Los detalles del juicio serán anunciados más adelante. En los procedimientos verán como sigue adelante”, agregó.

El ataque del 17 de septiembre fue el segundo desde el mes de abril con la embajada norteamericana como objetivo. Los militantes detonaron coches bomba antes de disparar cohetes contra el edificio fuertemente fortificado.

El Sr Saleh no identificó a los sospechosos, pero se citaron fuentes oficiales señalando que se trataba de la misma célula – dirigida por un militante llamado Abu al-Ghaith al-Yamani – cuyo arresto se anunció una semana después del ataque."

La simple y desagradable verdad es que Yemen se encuentra ahora en el cruce de la devastadora fuerza imperial norteamericana. Sobre la razón de ello, solo necesitaríamos observar el siguiente informe de febrero del 2009:

Los grandes petroleros de Yemen consideran inversiones

Según el periódico pan-árabe al-Hayat, Aidarous señaló que el ministro de Recursos Petroleros y Minerales de Yemen ha recibido ocho proyectos de inversión por parte de compañías internacionales, cuatro de los cuales fueron de las mayores petroleras en busca de negociaciones directas con Yemen.

Las compañías incluyen a Exxon Mobil, Total, y BP, dijo el ministro, pero no explicó la naturaleza de las inversiones.

Yemen también posee importantes reservas de gas natural que están en proceso de ser exploradas y explotadas por la multinacional francesa Total. Pero quizás el recurso estratégico más importante de Yemen es su ubicación. Emplazado en el extremo sur de la península arábica, el puerto yemení de Aden, y el golfo de Aden en general, tiene una ubicación ideal para el transporte de los dos y cruciales combustibles mencionados. Más del 30% de todo el petróleo crudo y más del 10% del comercio global pasan a través del Golfo de Aden, y el control del mismo brinda control sobre el transporte en la región (piensa en la piratería) y sobre el acceso a las costas de las naciones del este africano ricas en petróleo como Somalia y Sudán.


Yemen, con el golfo de Aden
al sur y Somalia y Sudan al sudoeste

Con el cambio climático, bajo la forma de rebote glacial o bajo una nueva ‘era de hielo’, y con el masivo caos social que ocasionaría en todo el mundo, y con elevadas probabilidades de suceder en el futuro cercano, sin dudas la elite psicopática está ansiosa por asegurarse su propia y confortable supervivencia a nuestras expensas.

Yemen – Ayer y hoy

Yemen solo ha existido como país independizado durante menos de 50 años. Durante y después de la segunda guerra mundial, Aden era considerada fundamental en la defensa de los intereses británicos imperiales en el Medio Oriente, el Golfo y el Océano Índico. En mayo de 1956, un ministro británico, Lord Lloyd, declaró que “para el previsible futuro no sería razonable, o del interés de los habitantes de la colonia, aspirar a cualquier objetivo más allá de un considerable grado de auto-gobierno interno”. Naturalmente, los yemeníes estaban menos que entusiasmados acerca de estar indefinidamente bajo el dominio de los británicos.

Históricamente, Yemen había sido dividido en dos gobiernos, Yemen del Norte y del Sur. En 1956, mientras su gobernante en aquel entonces, Imam Ahmed, no interfiriera, los británicos estaban dispuestos a permitir una relativa independencia para Yemen del Norte. Sin embargo, Yemen del Sur permanecería totalmente británica, al menos económicamente. En respuesta a un creciente y poderoso movimiento sindical por parte de la clase trabajadora árabe que demandaba mejores salarios, mejoras en el estándar de vida e infraestructura, los británicos intentaron consolidar su control en el sur estableciendo en 1959 la Federación de Arabia del Sur, un desastre creado por los varios emires, jeques y sultanes que estaban dispuestos a seguir del lado de los británicos en contra de las aspiraciones nacionalistas yemeníes a cambio de una buena posición y riqueza.

British Petroleum había establecido una refinería en 1954 y toda la riqueza que este recurso habría y debería haber provisto al pueblo yemení fue, en lugar de ello, enviado hacia otros intereses estratégicos británicos en otros lugares del mundo, dejando en la pobreza a gran parte de la población. Mientras que la elite gobernante británica siempre ha visto (y todavía lo sigue haciendo) a todos (o a casi todos) los pueblos no-occidentales como poco más que animales salvajes, al igual que muchos otros países colonizados, el pueblo yemení no tenía dificultades en reconocer la injusticia de la situación. Enfrentados a un creciente movimiento militante nacionalista dentro de Yemen del Sur y del Norte, los británicos reaccionaron ante las justificadas protestas de una población civil movilizada de la única forma que saben hacer – con engaño y fuerza.

Luego de una oleada de manifestaciones del Congreso de Sindicatos de Aden (¡como se atreven!) que continuó con arrestos masivos, golpizas y torturas por parte del ejército británico, un número de activistas y organizaciones de Aden y áreas aledañas se unificaron para crear el Frente Nacional por la Liberación del Ocupado Yemen del Sur, o NLF por sus siglas. Sus líderes eran de clase media… empleados, maestros, oficiales.2 Para tratar con los insurgentes ('terroristas' en el léxico moderno), los británicos decidieron utilizar el comprobado y confiable método de atemorizar a la población local. Proclamaron como ‘áreas prohibidas’ a aquellas áreas de insurgentes y lanzaron panfletos pidiendo a los habitantes que se vayan (¿no te recuerda a la táctica de cierto país del medio oriente en enero del 2009?). Con esa formalidad cumplida, la Real Fuerza Aérea bombardeó las áreas, acabando con toda señal de actividad humana. Las cosechas fueron destruidas, se secuestraron animales y dinamitaron casas, (nuevamente, ¿esto te recuerda algo?) Cuando los granjeros yemeníes comenzaron a trabajar sus tierras por las noches, el ejército británico agregó el bombardeo nocturno.3

Se llevaron a cabo operaciones de búsqueda a gran escala en un intento por restringir el movimiento de hombres y armas del NLF. Inevitablemente estas búsquedas, acompañadas por abusos racistas y maltrato físico, paulatinamente fueron alienando a la población. Stephen Harper, corresponsal de Daily Express en Aden, escribió cariñosamente sobre las tropas que “hay muchos golpes de botas, armas y puños” pero que esto no era brutalidad sino una “furia honorable”. Un oficial recordó cómo, cuando a las tropas les prohibieron llamar ‘negros’ (‘wog’ en inglés) a los árabes, respondieron humorísticamente llamándolos ‘morochos’ (‘gollies’ en inglés) (ver aquí el origen y uso de la palabra golliwog). La contra-productividad de semejante abuso siempre estuvo (y todavía está) perdida en la elite política británica y en el ejército y obviamente no hicieron nada para ganarse los ‘corazones y mentes’ del pueblo yemení en su rebelión contra la dominación extranjera.

Otra táctica utilizada por el ejército británico (reconocerás esta) fue el envío de ‘Grupos de Divisiones Especiales’ (SAS por sus siglas en inglés). Estas eran patrullas de ocho a diez hombres con un oficial a cargo. Vestidos de árabes llevaban a cabo redadas, requisas y ataques contra objetivos civiles y militares británicos y yemeníes que luego podían ser atribuidos a los insurgentes en un esfuerzo por justificar la opresión británica. Los SAS fueron utilizados en su primera misión oficial en contra de guerrillas urbanas y también en escuadrones ‘Keeni Meeni’ (un término Swahili que apropiadamente significa ‘serpientes resbaladizas). Los miembros de 'Keeni Meeni' eran los hombres SAS que tenían más probabilidad de hacerse pasar por árabes...5

Sin fuentes de inteligencia en el seno de la población árabe local, a los líderes militares británicos se les ocurrió la inspiradora idea de que la tortura de prisioneros era lo siguiente y lo mejor que hacer. Principalmente se trataba de golpizas pero también técnicas de privación sensorial que luego serían utilizadas durante los 30 años de guerra sucia en Irlanda del Norte y más recientemente en Irak y Afganistán.

En aquel momento, en la prensa británica se acusó de tortura y brutalidad a los Highlanders de Argyll y Sutherland, un regimiento de infantería del Ejército Británico. La condena de miembros del regimiento en 1981 por el brutal asesinato de dos agricultores católicos en Irlanda del Norte en 1972 condujo a revelaciones acerca de los eventos en Yemen. El Sunday Mail de Glasgow informó que había:

conducido una cuidadosa y completa investigación incluyendo las declaraciones juradas de una docena de soldados y oficiales detallando asesinatos y robos a los árabes locales. Un solo soldado admitió haber asesinado a cinco civiles desarmados en diferentes incidentes. Varios otros dijeron que utilizaron inyecciones de morfina para asesinar a los cautivos. Otros declararon haber sido testigos del asesinato con bayonetas de un adolescente árabe cuyo único crimen fue haber sido encontrado en un café luego de un toque de queda.6

Eventualmente, los británicos fueron obligados a abandonar Yemen (al menos físicamente) y los dos reinos del norte y del sur fueron formalmente unificados como la República de Yemen el 22 de mayo de 1990. La complicada historia de la retirada británica y la unificación del norte y sur está más allá del alcance de este artículo. Sin embargo, un breve análisis de la historia social y política de Yemen de los últimos 50 años alcanza para mostrar que la gran mayoría de los conflictos internos han sido respecto a un solo tema – derechos humanos y el deseo de personas normales de vivir una vida digna libre de la opresión y la inequidad. Cuando tales aspiraciones entran en conflicto (como sucede invariablemente) con los intereses ‘geo-estratégicos’ de las potencias mundiales como EEUU, Inglaterra, o los ideales megalomaníacos, pseudo-religiosos y racistas del estado de Israel, la gente normal pierde. Hace 100 años, la elite británica podía aplastar fácilmente tales revueltas populares y explicarlas como el resultado de sus generosos esfuerzos por civilizar a ‘personas subdesarrolladas’. Hoy, sin embargo, no es tan fácil engañar a un público mundial algo más educado y se debe confeccionar un argumento más convincente. Hoy en día, ese argumento es denominado como “la amenaza mundial del terrorismo”.

Hoy en Yemen, las personas que los gobiernos de EEUU, Inglaterra e Israel tildan de ‘terroristas musulmanes’, ‘al-Qaeda en la Península Arábica’, ‘al-Qaeda en Yemen’ etc. etc. son en realidad miembros de tribus locales y sus familias que reclaman justicia social y lo han estado haciendo durante varias décadas. Muy probablemente depondrían sus armas fácilmente si el gobierno les brindara ayuda económica y simples concesiones tales como rutas y colegios. Pero eso es mucho pedir para las potencias mundiales o para el gobierno títere de Yemen. Entregar algo de poder al pueblo es, en las mentes distorsionadas y conducidas por la codicia de la elite global, el primer paso en la pérdida del control, y el control sobre los seres humanos normales y nuestro planeta es la sangre de nuestros corruptos y psicológicamente desviados líderes.

Y así volvemos al suicida de la ropa interior que, según nos dicen, fue entrenado por terroristas musulmanes en Yemen. En respuesta a esta falsa amenaza (y ciertamente antes que incluso apareciera) el ejército norteamericano (y sus aliados de Arabia Saudita), al igual que el ejército británico antes que ellos, han estado bombardeando, lanzando cohetes y ametrallando, no ‘al-Qaeda en Yemen’, sino a civiles
yemeníes comunes y miembros de tribus que se atrevieron a levantar sus voces, puños y armas contra la injusticia imperial e interna.

Notas


1. Glen Balfour-Paul, The End of Empire in the Middle East, Cambridge 1991, p.67
2. Joseph Kostiner, The Struggle for South Yemen, London 1984, p. 53
3. John Newsinger, British Counter-Insurgency, Palgrave 2002, p. 117
4. Stephen Harper, Last Sunset, London 1978, p. 85
5. Tony Geraghty, Who Dares Wins, London 1992, p. 400-403
6. David Ledger, Shifting Sands: British in South Arabia 1981, Peninsular

0 comentarios: