El efecto antioxidante del té verde
Etiqueta:
Salud
Carmen Reija López
Las Provincias
26/06/10
El nombre científico del árbol del té es Camellia sinensis, y existen numerosas variedades. Crece de manera natural en la India y China y se ha empezado a cultivar en otras zonas del planeta debido a su interés económico. El té verde se obtiene a partir de la hoja sin procesar, que mantiene intactas sus propiedades.
Siga leyendo, haciendo click en el título...
Entre los componentes químicos destacan: alcaloides (cafeína y teofilina), polifenoles (flavonoides, catecoles y taninos), vitaminas del grupo B, provitamina A, vitaminas C y E, minerales (flúor, calcio potasio y magnesio), ácidos orgánicos (succínico, oxálico, etc.), y glúcidos (inositol, azúcares reductores, etc.).
Se le atribuyen muchas propiedades farmacológicas relacionadas con sus principios activos:
1. Estimulantes, por la cafeína y teofilina, para tratar la fatiga mental y física.
2. Antioxidantes, por los catecoles, que eliminan radicales libres.
3. Diuréticas, por los polifenoles, por el aumento del volumen de orina.
4. Metabólicas, pues sus principios activos actúan a varios niveles para conseguir un óptimo funcionamiento del organismo (lipolítico, hipolipemiante, trombolítico, hipoglucemiante y antidiarreico).
En España se autoriza como diurético, lipolítico, limitante de la absorción de azúcares y grasas y coadyuvante en regímenes de adelgazamiento. Su mayor aplicación se centra en el tratamiento del sobrepeso moderado, por mecanismos diferentes aunque complementarios.
Han aparecido efectos secundarios, como: gastrointestinales (vómitos y náuseas, si se toma en ayunas), neurológicos/psicológicos (insomnio y nerviosismo), renales (su capacidad diurética puede provocar pérdida de iones), y metabólicos (reduce la absorción de vitamina B1 y de hierro).
No sería recomendable para personas con trastornos cardiacos, arritmias, insuficiencia coronaria o con úlcera gastroduodenal. Además, puede provocar toxicidad hepática, no se le puede dar a los niños, ni consumirlo en exceso durante el embarazo. Deben tomarse precauciones si se administra a hipertensos, a pacientes tratados con digitálicos o con IMAO y a personas con problemas para conciliar el sueño (es más adecuado tomarlo por la mañana o a primera hora de la tarde).
Aunque su consumo suele ser por vía oral (infusiones, cápsulas, etc.), puede ser aplicado (sólo o combinado) por otras vías en productos comerciales de todo tipo: cremas, geles, etc.
Imprescindible el consumo racional, pues tiene efectos farmacológicos cuyo exceso puede causar daños al organismo. Consulta siempre al especialista sanitario para evitar los efectos cruzados entre la medicina tradicional y la fitoterapia.
Siga leyendo, haciendo click en el título...
Entre los componentes químicos destacan: alcaloides (cafeína y teofilina), polifenoles (flavonoides, catecoles y taninos), vitaminas del grupo B, provitamina A, vitaminas C y E, minerales (flúor, calcio potasio y magnesio), ácidos orgánicos (succínico, oxálico, etc.), y glúcidos (inositol, azúcares reductores, etc.).
Se le atribuyen muchas propiedades farmacológicas relacionadas con sus principios activos:
1. Estimulantes, por la cafeína y teofilina, para tratar la fatiga mental y física.
2. Antioxidantes, por los catecoles, que eliminan radicales libres.
3. Diuréticas, por los polifenoles, por el aumento del volumen de orina.
4. Metabólicas, pues sus principios activos actúan a varios niveles para conseguir un óptimo funcionamiento del organismo (lipolítico, hipolipemiante, trombolítico, hipoglucemiante y antidiarreico).
En España se autoriza como diurético, lipolítico, limitante de la absorción de azúcares y grasas y coadyuvante en regímenes de adelgazamiento. Su mayor aplicación se centra en el tratamiento del sobrepeso moderado, por mecanismos diferentes aunque complementarios.
Han aparecido efectos secundarios, como: gastrointestinales (vómitos y náuseas, si se toma en ayunas), neurológicos/psicológicos (insomnio y nerviosismo), renales (su capacidad diurética puede provocar pérdida de iones), y metabólicos (reduce la absorción de vitamina B1 y de hierro).
No sería recomendable para personas con trastornos cardiacos, arritmias, insuficiencia coronaria o con úlcera gastroduodenal. Además, puede provocar toxicidad hepática, no se le puede dar a los niños, ni consumirlo en exceso durante el embarazo. Deben tomarse precauciones si se administra a hipertensos, a pacientes tratados con digitálicos o con IMAO y a personas con problemas para conciliar el sueño (es más adecuado tomarlo por la mañana o a primera hora de la tarde).
Aunque su consumo suele ser por vía oral (infusiones, cápsulas, etc.), puede ser aplicado (sólo o combinado) por otras vías en productos comerciales de todo tipo: cremas, geles, etc.
Imprescindible el consumo racional, pues tiene efectos farmacológicos cuyo exceso puede causar daños al organismo. Consulta siempre al especialista sanitario para evitar los efectos cruzados entre la medicina tradicional y la fitoterapia.
0 comentarios:
Publicar un comentario