La Fed controlará los mercados estadounidenses

urgente24.com
31/03/08

EEUU enfrenta una de las peores crisis financieras en su historia desde la Segunda Guerra Mundial. Las consecuencias de ello se traduce en mayor regulación bancaria y de mercados, como parte de la reforma económica más importante desde la Gran Depresión de los años 30. Sumado al monopolio de los medios y a las restricciones en las libertades civiles (a causa de la guerra contra el terrorismo), USA camina de a poco hacia un nivel de autoritarismo más elevado, similar a la democracia capitalista en China.

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Según asegura hoy el periódico económico Financial Times, el primer ministro británico, Gordon Brown, y el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, han aceptado cooperar en la actual crisis financiera a través del establecimiento de un grupo de trabajo que supervise el sistema bancario.

Así, el Departamento del Tesoro de USA propondrá que el Congreso otorgue a la Reserva Federal amplias facultades para asegurar la estabilidad de los mercados financieros. La publicación señaló que la propuesta será planteada por el secretario del Tesoro, Henry Paulson, cuando dé a conocer un proyecto regulatorio que es vital para resolver los problemas que quedaron expuestos con la actual crisis hipotecaria.

De esta manera, la Reserva Federal tendría autoridad sobre las firmas en Wall Street pero solo cuando las prácticas de un banco de inversiones amenacen todo el sistema financiero, adelantó el diario

Distintos expertos aseguran que por la carencia de normas estrictas en el mercado financiero se realizaron prestamos que fueron indebidamente documentados, lo que justificaría la presencia de un ente regulador (la Fed) de los movimientos financieros.

La ejecución de esos préstamos morosos ha sido el principal factor de una crisis que amenaza a la economía con la recesión, según señalan. En ese sentido, el plan propone que la Reserva Federal tenga amplia autoridad para exigir información de todos los agentes de los mercados financieros, así como el derecho a colaborar con otros reguladores en la formulación de las normas que deberán acatar las empresas y las instituciones.

Si se determina que las acciones de algunos de esos participantes o agentes del mercado plantean un riesgo para todo el sistema financiero o para la economía, "la Reserva Federal debería tener autoridad para exigir medidas correctivas que resuelvan los riesgos o limiten esos riesgos", según un resumen de la propuesta difundida por el diario.

Aquellos que acusan a los banqueros internacionales de pertenecer a carteles cerrados y con ansias de dominación mundial han advertido que un movimiento así pudiera realizarse en contra del libre mercado: la película Zeitgeist, famosa por sus denuncias de conspiraciones mundiales, ya definía hace algunos años que el camino a seguir por la Reserva Federal estadounidense era la de control total de la economía. Y muy errada no estaba.

Por otra parte, los medios de comunicación, casi todos englobados en un oligopolio, arrojan una visión unificada de las cosas sin permitir un discenso mínimo, influyendo a la opinión pública con una agenda impuesta por ellos mismos día a día.

La guerra contra el terrorismo ha hecho de los medios de comunicación unos simples voceros de la política del gobierno, así es que las restricciones a qué es lo que se puede decir y qué no, están sujetas a decisiones políticas en un estado de guerra. Cualquier discenso es tomado con alerta como un posible brote antiamericano en una especie de macartismo que ya no tiene a los comunistas de enemigos sino al terrorismo.

Esas restricciones, justificadas por la guerra, sumadas a la crisis financiera que hará que la Reserva Federal controle los mercados, hacen que USA se vea envuelta en una especie de sistema totalitario que podría asemejarse mucho al sistema chino. Y aunque recién después de ciertas modificaciones y reinterpretaciones de la democracia en China es que puede hacerse esta comparación con USA, el resultado de ambas sería el mismo: la presencia de un estado fuerte que se conduce a un totalitarismo autoritario.