Sarkozy pone la marcha atrás en su proyecto de 'Gran Hermano'

El presidente francés ordena abrir negociaciones sobre el fichero de datos íntimos 'Edvige'

Andrés pérez
Público
10/09/08

El presidente Nicolas Sarkozy ha puesto la marcha atrás en su proyecto de crear el fichero Edvige, una base de datos policial centralizada con informaciones íntimas sobre todo tipo de ciudadanos, incluidos menores. Ha cedido así ante los primeros vientos adversos de indignación general suscitada por su proyecto.

Anteayer a última hora, el presidente reunió furibundo a su ministra de Interior, Michèle Alliot-Marie, y a varios responsables de la seguridad y la Policía. Una reunión con la que intentaba poner fin a la polémica que vio enfrentarse ante las cámaras de televisión a ministros proGran Hermano, de un lado, y ministros antiGran Hermano, de otro.

Quien es, de hecho, el padre de la criatura Edvige -el propio Sarkozy- montó una sesión de tirones de orejas y exigió a su ministra algo imposible: que presentara la cara amable de ese fichero policial, organizando una "concertación" con las asociaciones de derechos humanos, seguida de "decisiones para proteger las libertades".

...Siga leyendo, haciendo click en el título...


"Cohesión y sangre fría"

Ayer, el presidente reiteró su mensaje durante el consejo de ministros, añadiendo que exigirá a su Gobierno "cohesión" y "sangre fría" en torno al proyecto.Con esos dos mensajes, el presidente estaba exigiendo, de hecho, una destreza de contorsionista a sus ministros.

Porque la realidad liberticida del fichero deseado por Sarkozy, ha quedado para siempre retratada en el Boletín Oficial de la República Francesa del 1 de julio, en un decreto aprobado a la chita callando, y ahora consultable por internet.

El texto autoriza a la Polica a conservar datos sobre "el entorno" y "las relaciones directas" de cualquier persona, junto a los datos administrativos, fiscales u otros, así como las fotografías y notas sobre los signos distintivos físicos. También las informaciones sobre sus "opiniones políticas, filosóficas o religiosas" y su pertenencia o no a tal partido, sindicato o asociación. Cosa que equivale a un fichado sexual, político, y hasta étnico de la población.

"Susceptible de atentar al orden público"

Si desea usted figurar en ese fichero, nada más fácil: no tiene por qué cometer ningún delito y ni siquiera verse imputado en nada que de lejos sea constitutivo de un presunto delito.

Simplemente, debe usted tener más de 13 años, efectuar una estancia en Francia y hacer algo que sea calificado de "rol social" por la Policía. También puede figurar con pelos y señales si las autoridades estiman que usted es "susceptible de atentar al orden público".

La oposición, desde el centro hasta la extrema izquierda, exigía ayer la retirada pura y simple del decreto liberticida. El 16 de octubre se han convocado manifestaciones de protesta en toda Francia.

Un viraje al centro para reconquistar a Francia

Un día de 2006, cuando Dominique de Villepin andaba preocupadísimo por el riesgo de un Nicolas Sarkozy presidente, autoritario, ultraatlantista y ultraliberal, Jacques Chirac lo cogió de la mano. Y le dijo: "No se preocupe, Villepin. O Nicolas Sarkozy no es elegido, y no podrá aplicar su programa; o Nicolas Sarkozy sí es elegido, y no podrá aplicar su programa".

Ahí está la clave de lo que está pasando con el fichero Edvige. La criatura salida de la mente de un ex ministro de Interior populista subido a candidato presidencial, choca ahora con un presidente en ejercicio que necesita urgentemente recentrarse, para reconquistar a la opinión pública.

Hace unos meses, Sarko habría sacado el látigo, gritado contra la "granujacracia", clamado que debe "reformar".

Ahora, ante el primer riesgo de un frente antiEdvige abarcando desde el centroderecha hasta la extrema izquierda de la opinión, el presidente responsable se autodescubre un perfil de protector de las libertades.

Sarkozy empieza apenas a reconquistar a la opinión pública desde el bajón de enero pasado. Lo demuestran recientes sondeos de varios institutos, y en particular el de LH2 para Le Nouvel Obs, que otorga a Sarko el 45% de apoyo, su mejor resultado en nueve meses. Y ahí, en esa reconquista por el centro, está la clave de su nueva moderación. Camino de lo que dijo el viejo Chirac.