Ejército de EEUU informa que mató a un niño de 12 años en Bagdad

Reuters/La Jornada
09/05/09

El Ejército estadunidense informó este sábado que sus tropas habían disparado y dado muerte a un niño iraquí de 12 años, sospechoso de haber arrojado una granada contra ellos.

El Ejército señaló también que cree que insurgentes estaban pagando a menores para que les ayudasen.

Un integrante de la policía iraquí, hablando bajo condición de anonimato, dijo, no obstante, que el niño, que afirmaron se llamaba Omar Moussa Salih, no había estado implicado en el lanzamiento de la granada.

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Las fuerzas estadunidenses e iraquíes estuvieron bajo ataques con granadas el jueves en el lado oeste de Mosul, la ciudad norteña vista como el último baluarte de al Qaeda y de otros grupos insurgentes, dijo el comandante Derrick Cheng, portavoz estadunidense en el norte de Irak.

Las fuerzas del Ejército estadunidense respondieron disparando a muchas personas, matando al niño. Fue encontrado con 10 mil dinares iraquíes, cerca de 8.50 dólares, en su mano.

"Tenemos todas las razones para creer que los insurgentes le están pagando a niños para realizar estos ataques o para ayudar a los atacantes en algún puesto, pero indudablemente, ubicando a los niños en situaciones de riesgo", dijo Cheng.

La policía iraquí en Mosul dijo que al chico, que vendía dulces en la calle, le dispararon más de una vez en la cabeza.

Su hermano, de ocho años de edad, huyó cuando le dispararon a Omar, dijo la policía.

Cheng dijo que se detuvo por poco tiempo a otro niño, pero que fue dejado en libertad.

El incidente en Mosul se produce menos de dos meses antes de que las fuerzas de combate estadunidense deban retirarse de ciudad iraquíes, incluyendo Mosul, como parte de una pacto de seguridad bilateral que prevé un retiro total de Estados Unidos para finales del 2011.

Hace dos semanas, una incursión estadounidense en el sur de Irak provocó una furiosa oleada de condenas de parte del Gobierno iraquí, que demandó que los soldados estadounidenses fueran juzgados por las muertes de "ciudadanos inocentes".

La violencia ha descendido en Irak desde el clímax de asesinatos sectarios, desatados por la invasión encabezada por Estados Unidos el 2003, pero los ataques suicidas con bombas continúan, especialmente en áreas donde conviven varias etnias y religiones.