Retrospectiva: ¿Puede esta caja negra ver el futuro?

Redorbit.com
Traducción de alonindark
11/02/05

En el sótano de una polvorienta biblioteca de la universidad de Edimburgo está situada una pequeña caja negra, aproximadamente del tamaño de dos paquetes de cigarrillos uno al lado del otro, que revuelve números aleatorios en una interminable secuencia. A primera vista se trata de una pieza de equipo sin complicaciones. Encerrada en el metal, que contiene en su corazón un microchip no más complejo que los que se encuentran en modernas calculadoras de bolsillo. Pero, de acuerdo a un creciente grupo de científicos de primera, esta caja tiene bastante poderes extraordinarios. Es, afirman, el "ojo" de una máquina que parece capaz de penetrar en el futuro y predecir grandes acontecimientos mundiales.

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La máquina aparentemente sintió los ataques del 11 de septiembre contra el World Trade Center cuatro horas antes de lo ocurrido -, pero en el ánimo febril de las teorías de la conspiración del momento, las declaraciones fueron rápidamente relegadas por los escépticos. Pero el pasado mes de diciembre también parece advertir anticipadamente del tsunami de Asia justo antes del profundo maremoto que precipitó la tragedia épica.
Ahora, incluso los escépticos están reconociendo que aquí hay una pequeña caja con poderes aparentemente inexplicables.
'Esto es tierra- cosa aplastante", dice el Dr Roger Nelson, investigador emérito en la Universidad de Princeton en los Estados Unidos, que dirige el proyecto de investigación tras el fenómeno de la 'caja negra'. "Estamos muy al principio del proceso de tratar de averiguar lo que está pasando aquí. En este momento estamos tanteando en la oscuridad. Las investigaciones del Dr Nelson, el llamado Proyecto de Conciencia Global, fue originalmente organizado por la Universidad de Princeton y se centran en uno de los más extraordinarios experimentos de todos los tiempos. Su objetivo es detectar si toda la humanidad comparte una sola mente subconsciente que todos podamos aprovechar sin darnos cuenta. Y máquinas, como la caja negra de Edimburgo han arrojado una tentadora posibilidad: que los científicos pueden haber involuntariamente descubierto una manera de predecir el futuro.
Aunque muchos consideran que los objetivos del proyecto serían poco más que tonterías, ha atraído sin embargo una lista de 75 científicos respetados de 41 naciones diferentes. Los investigadores de Princeton - donde Einstein pasó gran parte de su carrera - trabajan junto a científicos de las universidades en el Reino Unido, los Países Bajos, Suiza y Alemania. El proyecto es también el más riguroso y de más larga duración jamás investigado en el potencial de los poderes paranormales.
'Muy a menudo los fenómenos paranormales se evaporan si se estudian el tiempo suficiente para ello ", dice el físico Dick Bierman de la Universidad de Amsterdam. 'Pero esto no está sucediendo con el Proyecto de Conciencia Global. El efecto es real. La única disputa es acerca de lo que significa '.
El proyecto tiene sus raíces en el extraordinario trabajo del Profesor Robert Jahn de la Universidad de Princeton durante fines de los años 70. Él fue uno de los primeros científicos modernos en tomar en serio los fenómenos paranormales. Intrigado por cosas tales como la telepatía, telekinesia - la supuesta energía psíquica para mover objetos sin el uso de la fuerza física - y percepción extrasensorial, están decididos a estudiar los fenómenos utilizando la más actualizada tecnología disponible.
Una de estas nuevas tecnologías era una caja negra de aspecto humilde conocido como generador de eventos aleatorios (REG). Este utiliza tecnología computarizada para generar dos números - un uno y un cero - en una secuencia totalmente aleatoria, más bien como un lanzador de monedas electrónico. El patrón de unos y ceros - "cabezas" y "colas" por así decirlo - se podría imprimir como un gráfico. Las leyes de probabilidad dictan que los generadores deberían sacar el mismo número de unos y ceros - que seria representado por una línea casi plana en el gráfico. Cualquier desviación de este número igual aparece como un aumento de la curva con suavidad.
Durante fines de los 70, el Prof Jahn decidió investigar si el poder del pensamiento humano por sí solo pueda interferir de alguna manera con las lecturas usuales de la máquina. Él detenía extraños en la calle y les pedía que concentren sus mentes en su generador de números. En efecto, fue pidiéndoles tratar de sacar más cabezas que colas (caras que cruces).
Se trata de una idea absurda en el momento. Los resultados, sin embargo, fueron sorprendentes y nunca han sido satisfactoriamente explicados.
Una y otra vez, la gente completamente común demostraban que sus mentes pueden influir en la máquina y producir fluctuaciones significativas en el gráfico, 'obligando' a la desigualdad en el número de "cabezas" o "colas".
Según todas las leyes conocidas de la ciencia, esto no debería haber sucedido -, pero lo hizo. Y sigue sucediendo.
El Dr Nelson, también trabajando en la Universidad de Princeton, extendió el trabajo del Prof Jahn llevando a las máquinas de números aleatorios a grupos de meditación, que fueron muy populares en EEUU en el momento. Una vez más, los resultados fueron impresionantes. Los grupos fueron colectivamente capaces de provocar cambios sustanciales en los patrones de números.
A partir de entonces, el Dr Nelson fue enganchado. Usando Internet, conectó 40 generadores de sucesos de todo el mundo a su laboratorio de computadoras en Princeton. Estos corren constantemente, de día en día, generando millones de diferentes piezas de datos. La mayor parte del tiempo, el resultado gráfico de su ordenador aparece más o menos como una línea plana.
Pero entonces, el 6 de septiembre de 1997, sucedió algo increíble: el gráfico se disparó hacia arriba, registrando un cambio repentino y masivo en el número de secuencia de las máquinas de todo el mundo empezaron a reportar enormes desviaciones de la norma. El día fue de importancia histórica por otra razón, también. Porque fue el mismo día en que se calcula que mil millones de personas en todo el mundo vieron el funeral de Diana, Princesa de Gales, en la Abadía de Westminster.
El Dr Nelson estaba convencido de que los dos eventos deben estar relacionados de alguna manera. ¿Podría haber detectado un fenómeno totalmente nuevo? ¿Podría la efusión emocional concentrada de millones de personas ser capaz de influir en la salida de su REGs. Si es así, ¿cómo?
El Dr Nelson se encontraba en dificultades para explicarlo. Así, en 1998, reunió a científicos de todo el mundo para analizar sus conclusiones. Ellos, también, quedaron perplejos y decidieron ampliar y profundizar la labor del Prof Jahn y el Dr. Nelson. El Proyecto Conciencia Global había nacido.
Desde entonces, el proyecto se ha ampliado enormemente. Un total de 65 Huevos (como los generadores han sido llamados) en 41 países ya se han contratado para actuar como los 'ojos' del proyecto. Y los resultados han sido sorprendentes e inexplicables en igual medida. Por durante el curso del experimento, los Huevos han "percibido" toda una serie de importantes acontecimientos mundiales como fueron sucediendo, desde el bombardeo de la OTAN a Yugoslavia, la tragedia del submarino Kursk al empate de las elecciones del 2000 en EEUU.
Los Huevos también detectan regularmente grandes celebraciones a nivel mundial, como el Fin de Año.
Sin embargo, el proyecto arrojó su mayor enigma el 11 de septiembre de 2001. Mientras todo el mundo estaba todavía contemplando el horror de los ataques terroristas desplegados a través de Nueva York, algo extraño estaba sucediendo a los huevos. No sólo habían registrado los ataques mientras realmente pasaban, sino que el característico cambio en el patrón de los números había comenzado a modificarse cuatro horas antes de que los dos aviones incluso golpearan las Torres Gemelas. Habían, al parecer, detectado que un acontecimiento de importancia histórica estaba a punto de tener lugar antes de que los terroristas incluso hubieran abordado sus vuelos fatídicos. Las consecuencias, no menos importantes para los servicios de seguridad de Occidente que constantemente monitorean la 'charla' electrónica, son claramente enormes.
"Yo sabía entonces que había una gran cantidad de trabajo por delante," dice el Dr Nelson.
¿Qué puede estar pasando? ¿Era una ocurrencia estrafalaria tal vez?
Parece que no. Pues en las siguientes semanas de diciembre del año pasado, las máquinas se pusieron salvajes una vez más. Veinticuatro horas después, un terremoto de profundidad bajo el Océano Índico provocó el tsunami que devastó el sudeste de Asia, y se cobró la vida de un estimado cuarto de millón de personas.
¿Así el Proyecto Conciencia Global podría prever realmente el futuro?
Los escépticos señalan con toda razón que siempre hay algún acontecimiento mundial que se podrían utilizar para 'explicar' los momentos en que se comportaron de manera errática las máquinas Huevos. Después de todo, nuestro mundo está lleno de guerras, catástrofes y atentados terroristas, así como de ocasionales celebraciones globales. ¿Están los científicos simplemente tratando demasiado difícil de detectar patrones en sus datos brutos?
El equipo detrás del proyecto insiste en que no. Afirman que mediante el uso de técnicas de rigor científico y de gran alcance matemático es posible excluir cualquiera de esas conexiones al azar.
"Estamos perfectamente dispuestos a descubrir que hemos cometido errores, "dice el Dr Nelson. "Pero no hemos sido capaces de encontrar ninguno, y ni lo ha sido nadie. Nuestros datos muestran claramente que las posibilidades de conseguir estos resultados por casualidad son un millón a uno en contra. Eso es muy importante." Sin embargo, muchos siguen siendo escépticos.
El Profesor Chris French, un psicólogo y señalado escéptico del Goldsmiths College de Londres, dice: "El Proyecto Conciencia Global ha generado algunos resultados muy interesantes que no pueden ser fácilmente destituidos. Estoy involucrado en un trabajo similar para ver si conseguimos los mismos resultados. No hemos logrado aún hacerlo pero es sólo una primera prueba. El jurado todavía está fuera."
Y de forma inexplicable, sin embargo, no hay nada en las leyes de la física que se oponga a la posibilidad de predecir el futuro. Es posible - en teoría - que no sólo el tiempo pueda desplazarse hacia delante, sino al revés, también. Y si el tiempo refluye y fluye como las mareas en el mar, tal vez justamente seria posible predecir los principales acontecimientos mundiales. "Recordaríamos", en efecto, cosas que han tenido lugar en nuestro futuro.
"Hay muchas pruebas de que el tiempo puede ir hacia atrás", dice el Profesor Bierman de la Universidad de Amsterdam.
'Y si es posible que suceda en la física, entonces puede ocurrir en nuestras mentes también". En otras palabras, el Profesor Bierman opina que todos somos capaces de mirar en el futuro, si sólo pudiéramos aprovechar el poder oculto de nuestras mentes. Y hay un tentador cuerpo de evidencias que apoyan esta teoría.
El Dr John Hartwell, trabajando en la Universidad de Utrecht en los Países Bajos, fue el primero en descubrir evidencias de que la gente podía sentir el futuro. A mediados de los años 70 él enganchó a gente a máquinas de escaneo del hospital a fin de poder estudiar sus patrones de ondas cerebrales. Empezó por mostrarles una secuencia de provocativos dibujos animados. Cuando las imágenes se mostraban, las máquinas registraban las ondas cerebrales mientras reaccionaban fuertemente a las imágenes delante de ellos. Esto era de esperar. Mucho menos fácil de explicar es el hecho de que, en muchos casos, estos dramáticos patrones comenzaron a registrarse unos segundos antes de que cada una de las imágenes fuera incluso enseñada. Era como si los casos de estudio del Dr Hartwell estuvieran de alguna manera viendo en el futuro, y detectaran cuando el próximo chocante imagen se mostraba a continuación. Es extraordinario- y aparentemente inexplicable.
Pero iban a pasar otros 15 años antes que nadie tomara referencia del trabajo del Dr Hartwell cuando Dean Radin, un investigador que trabaja en América, conectó gente a una máquina que medía la resistencia de la piel a la electricidad. Esta se conoce que fluctúa en tándem con nuestro humor - de hecho, es este principio el que subyace a muchos detectores de mentira. Radin repitió los experimentos de "imagen respuesta" del Dr Hartwell mientras medía la resistencia de la piel. Una vez más, la gente comenzó a reaccionar unos segundos antes de que se mostraran las provocativas imágenes. Esto era claramente imposible, o así lo pensaba, por lo que siguió repitiendo los experimentos. Y siguió obteniendo los mismos resultados.
'Yo no lo creía tampoco ", dice el Profesor Bierman. "Así que también repetí el experimento conmigo mismo y obtuve los mismos resultados. Yo estaba conmocionado. Después de esto empecé a pensar más profundamente acerca de la naturaleza del tiempo" Lo que es más intrigante aún, dice el Profesor Bierman, es que otros laboratorios han producido resultados similares, pero aún no se han hecho públicos. 'No quieren ser ridiculizados así que ellos no van a publicar sus conclusiones", afirma. 'Así que estoy tratando de persuadirlos para publicar sus resultados al mismo tiempo. Eso, al menos, extendería el ridículo un poco más tenuemente! "
Si el Profesor Bierman tiene razón, sin embargo, entonces los experimentos no son asunto de risa. Ellos podrían ayudar a proporcionar una sólida base científica para tales fenómenos extraños como 'deja vu', la intuición y muchas otras curiosidades que todos hemos experimentado de vez en cuando. También pueden abrir una posibilidad mucho más interesante - de que un día podamos mejorar nuestros poderes psíquicos usando máquinas que puedan "sintonizar" a nuestra mente subconsciente, al igual que la pequeña caja negra de Edimburgo.
Así como hemos construido motores mecánicos para reemplazar a la fuerza muscular, podríamos algún día construir un dispositivo para mejorar e interpretar nuestras habilidades psíquicas ocultas?
El Dr Nelson es optimista -, pero no a corto plazo. "Podemos ser capaces de predecir que un gran acontecimiento mundial va a pasar. Pero no sabemos exactamente lo que ocurrirá o donde va a ocurrir ", dice. "Ponlo de esta manera- todavía no hemos obtenido una máquina que podamos vender a la CIA."
Pero para el Dr Nelson, hablar de esas máquinas psíquicas- con el potencial a nivel mundial para detectar catástrofes o atentados terroristas - es de mucho menos importancia que las implicaciones de su trabajo en términos de la raza humana. Por lo que sus experimentos parecen demostrar es que, si bien es posible que todos operamos como individuos, también parecemos compartir algo mucho, mucho mayor - una conciencia global. Algunos podrían llamarlo la mente de Dios.
"Nos han enseñado a ser monstruos individualistas", dice. "Hemos sido llevados por la sociedad a separarnos unos de otros. Eso no es correcto. Podemos estar conectados entre nosotros mucho más íntimamente de lo que nos damos cuenta".

Comentario SDLT: Arkadiusz Jadczyk comenta:

El Dr. Nelson es optimista- pero no a corto plazo. "Podemos ser capaces de predecir que un suceso va a pasar. Pero no vamos a saber exactamente qué sucederá o dónde va a suceder," dice. Él ha olvidado añadir: "Y no somos capaces de decir por adelantado si nuestra predicción es correcta o errónea. Tampoco somos capaces de asignar una probabilidad racional a nuestra predicción siendo correcta o errónea." Los gitanos que dicen la fortuna tienen probablemente un récord mejor...

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