El gobierno fascista de Israel amenaza con deportar a los palestinos que se rehúsen a jurar lealtad al Reich Judío.
Mail Online / Sott.net
Traducción para SDLT por Toño
03/06/09
La población árabe de Israel se verá forzada a jurar lealtad al estado Judío o enfrentaría castigos severos, bajo nuevas propuestas legislativas.
Un partido ultranacionalista dirigido por el ministro de relaciones exteriores israelí, dijo hoy que ha dispuesto una propuesta legislativa que vincula la ciudadanía israelí con un juramento de lealtad.
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El anteproyecto de ley subsigue una propuesta distinta presentada ayer por el mismo partido, que haría ilegal para los árabes el lamentarse por la 'catástrofe' – término árabe usado para describir la derrota y exilio sufridos tras la derrota que propició la fundación del estado Judío.
Ambas propuestas del partido Yisrael Beitenu del ministro de relaciones exteriores, Avigdor Lieberman, se enfocan en la deslealtad percibida de los ciudadanos árabes, quienes conforman apenas una quinta parte de una población de 7 millones.
El juramento de lealtad fue uno de los bastiones de la campaña de Lieberman durante las elecciones parlamentarias en Febrero.
Su prominente rol en el nuevo gobierno israelí, le ha dado a este último una clara inclinación inflexible y ha alimentado las preocupaciones internacionales sobre la voluntad de Israel de buscar un acuerdo de paz con los Palestinos.
La legislación, la cual debe pasar varios obstáculos antes de ganar apoyo final, le brindó fuertes críticas por parte de legisladores de oposición y de los grupos de derechos civiles.
Mohammed Darawshe, de las Iniciativas de Patrocinio de Abraham, la cual trabaja por medio de la coexistencia de Judíos y Árabes en Israel, dijo que la legislación refleja 'una ideología importada de regímenes obscuros que han colapsado'.
Yisrael Beitenu se deslizó hasta la tercera posición en las elecciones de Febrero, con un mensaje que sugería que los Árabes Judíos eran una amenaza interna para el país.
Apoyado ampliamente por israelíes que, como Lieberman, son inmigrantes de la antigua Unión Soviética, es un antiguo involucrado en el gobierno de coalición.
El partido dice que presentará su juramento de lealtad a un comité ministerial para una aprobación preliminar el Domingo.
La legislación haría a la ciudadanía contingente con un juramento de lealtad hacia Israel como 'un estado Judío, Sionista y democrático', dijo el portavoz del partido, Tal Nahum.
La propuesta de ley permitiría al gobierno rechazar la ciudadanía de cualquiera que no cumpla o realice algún tipo de servicio militar o nacional.
El primer ministro Israelí, Benjamin Netanyahu, todavía está por expresar su posición en el asunto.
El anuncio del partido vino un día después que introdujera otra propuesta que haría ilegales las demostraciones de lamento por su derrota y exilio en la guerra que estableció a Israel en 1948.
La propuesta recibió aprobación preliminar para continuar pero todavía necesita pasar varias lecturas en el parlamento antes de convertirse en ley.
La propuesta le daría tres años de prisión a cualquiera que participara en protestas públicas o en conmemoraciones.
Alex Miller, el legislador que respaldó la propuesta, le dijo a Radio Armada: 'Creo que podemos llegar a una posición en donde los ciudadanos de nuestro país no tendrían que lamentarse por el establishment del país en el que viven'.
El proyecto de ley parece no tener suficiente apoyo para ganar la aprobación parlamentaria. Sin embargo, provocaron reacciones furibundas.
La legisladora árabe Hana Swaid calificó a este proyecto de ley de Miller como 'racista', diciendo que 'elimina el derecho de los ciudadanos Árabes Palestinos a pronunciar su identidad y sentimientos nacionales'.
Contrario a los Palestinos en Cisjordania y en la Franja de Gaza, los Árabes Israelíes tienen todos los derechos de ciudadanía, pero sufren de discriminación y tienen poca identificación con un país que se define como Judío.
Ahmad Abdel Rahman, asistente del presidente Palestino Mahmoud Abbas, dijo que la administración de Netanyahu estaba 'azotando erráticamente en todas direcciones – en su política exterior, en el proceso de paz y aún en los derechos de sus propios ciudadanos'.
La legislación es el último intento del nuevo gobierno israelí por enfurecer a los ciudadanos Árabes del país y a sus vecinos.
Netanyahu ha sido inflexible contra los Palestinos, rechazando respaldar la independencia Palestina y revocando cualquier retiro israelí del Este de Jerusalén.
Los palestinos están esperanzados en hacer del Este de Jerusalén su capital en un futuro estado independiente al lado de Israel.
El Domingo, un oficial Palestino motivó a los Palestinos a comprar casas en los vecindarios Judíos en el Este de Jerusalén como medida para fortalecer la presencia Árabe en la disputada ciudad.
Hatem Abdel Qader, ministro de los asuntos de Jerusalén, dijo que comprar casas era una 'manera de defender Jerusalén'.
Israel capturó al Este de Jerusalén en la guerra de 1967 y de inmediato se anexó el territorio, un movimiento nunca reconocido por la comunidad internacional.
Ahora están establecidos varios vecindarios Judíos de gran tamaño en el Este de Jerusalén. Algunas familias Árabes han comenzado a mudarse a los vecindarios Judíos, donde los servicios municipales tienden a ser mejores.
Hoy, aviones israelíes esparcieron panfletos sobre la Franja de Gaza advirtiendo a los residentes a permanecer alejados de la frontera, mencionando el riesgo de sufrir un disparo. La milicia ha esparcido panfletos similares en el pasado.
El Ministro de Salud de Gaza dijo que un niño de 10 años resultó herido cuando fue golpeado por una de las canastas de metal que vienen en los paracaídas que se lanzan con los panfletos.
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