Treinta muertos dejó inundación en Centroamérica

Marie-Françoise Borel
Hora Cero
23/10/08

En estas últimas tres semanas, lluvias torrenciales que provocó una serie de tormentas y depresiones atmosféricas causaron estragos en América Central.

Los países más afectados por inundaciones y desprendimientos de tierra son Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua donde decenas de miles de personas buscaron amparo en refugios.

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Según el Observatorio de inundaciones de Dartmouth y datos de la Cruz Roja, en la región hubo 30 muertos y viviendas, infraestructura, cultivos y ganado sufrieron graves daños. Tan solo en Honduras hay unos 130.000 desplazados a causa de inundaciones y desprendimientos de tierra; el gobierno decretó el estado de emergencia y la Cruz Roja movilizó todos sus equipos.

La Sociedades Nacionales de la Cruz Roja, que colaboran estrechamente con las autoridades, desplegaron cientos de voluntarios y miembros del personal que asisten a miles de familias damnificadas distribuyendo alimentos, mantas, ropa, artículos de higiene y utensilios de cocina. Además, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja transfirió 270.000 francos suizos (245.000 dólares o 173.000 euros) de su Fondo de Reserva para el Socorro en Casos de Desastre y envió varios delegados de gestión de desastres de la Unidad Panamericana de Respuesta a Desastres (PADRU por su sigla en inglés), con sede en Panamá, para prestar apoyo inmediato a las operaciones de socorro.

Inicialmente, los fondos se utilizarán para proporcionar alimentos de emergencia y artículos de higiene a 1.500 familias (1.000 de Honduras y 500 de Nicaragua).

Las necesidades de los damnificados son el núcleo de la intervención

"La Federación Internacional también prepara un llamamiento de emergencia para asegurar que los damnificados reciban la asistencia vital que necesitarán en las próximas semanas hasta que puedan regresar a su hogar. Voluntarios y personal de la Cruz Roja hacen evaluaciones en las zonas más afectadas cuyos resultados serán determinantes para el plan de acción que llevaremos a cabo. El llamamiento se hará en los próximos días", señala J. P. Taschereau, Coordinador de Gestión de Desastres de la Federación en Panamá.

Tan solo en Honduras, hay más de 25.000 familias damnificadas y 8.000 personas alojadas en refugios de emergencia. En Costa Rica, los ríos se desbordaron, desprendimientos de tierra bloquean carreteras y hay 77.000 damnificados. Estas lluvias fueron las peores en 40 años y casi 2.000 personas buscaron amparo en refugios temporales.

En Nicaragua, hay más de 8.000 damnificados y se abrieron 22 refugios de emergencia para acogerlos. En El Salvador crece la preocupación por el alto riesgo de que haya otros desprendimientos de tierra y desbordamientos de ríos porque el suelo está saturado. Las familias damnificadas por las inundaciones están siendo alojadas en refugios de emergencia.

En Guatemala, unas 600 familias afectadas encontraron amparo en 40 refugios. Según los primeros informes oficiales, las lluvias torrenciales dejaron un saldo de más de 3.000 damnificados. Preocupan en particular las previsiones meteorológicas de fuertes precipitaciones la próxima semana.