Cobra influenza humana 60 vidas en Argentina

La Jornada
06/07/09

La influenza está en su pico más alto de contagio en el país; se considerará sospechoso a quien presente enfermedades respiratorias agudas con fiebre mayor a 38 grados.

Buenos Aires. El virus de la influenza humana cobró 60 vidas argentinas, dijo hoy el ministro de Salud, Juan Manzur, quien comprometió un esfuerzo de coordinación nacional para enfrentar la pandemia.

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Manzur ofreció una rueda de prensa al término de una reunión extraordinaria llevada a cabo con las autoridades sanitarias de todo el país, considerada tardía por la oposición, luego que la influenza está en su pico más alto de contagio en Argentina.

Durante el encuentro, que duró más de tres horas, los funcionarios evaluaron cómo ha avanzado el virus en las regiones de Argentina, ya que durante las primeras cuatro semanas sólo hubo contagios en Buenos Aires y su zona metropolitana.

El ministro, que asumió en el cargo apenas el miércoles pasado, en plena crisis sanitaria, explicó que se considerarán sospechosos de influenza humana los pacientes que presenten enfermedades respiratorias agudas con fiebre mayor a 38 grados.

Las personas que padezcan estos síntomas, dijo Manzur, deberán permanecer en aislamiento domiciliario voluntario, ya que, a diferencia de México, no se promoverán por el momento cierres de bares, restaurantes o cines.

Ante el alud de críticas al gobierno por la reacción a la pandemia, Manzur precisó que "en una primera etapa se produjo la contención para hacer el bloqueo de los contagios, y hoy vivimos una etapa de mitigación".

También calificó como correcta la decisión que adoptaron cinco provincias y la capital de decretar la emergencia sanitaria, aunque descartó que el gobierno nacional decrete igual medida.

"Se trata de una situación extraordinaria, hoy proporcioné documentación para que todos tengan la misma información, la emergencia sanitaria nacional ya está de hecho, y Salud cuenta con las herramientas para movilizar los recursos", afirmó.

Manzur refirió sin embargo datos confusos para la población, ya que informó que durante los últimos seis meses se han presentado 340 mil casos de diferentes tipos de influenza y actualmente hay 100 mil.

El titular de Salud aclaró, sin embargo, que el número de contagiados de influenza humana confirmados en laboratorio es de apenas dos mil 800.

El ministro de Salud anunció medidas para coordinar la lucha contra la influenza H/1N1 en todo el país, luego de que el estallido de contagios provocó pánico entre la población, que tomaba medidas autónomas para protegerse de la pandemia.

Juan Manzur, dijo también que el país pasó de una fase de contención de la enfermedad a una de mitigación, luego de que se confirmarse 60 víctimas fatales.

Los anuncios se producen en medio de una creciente polémica por las cifras oficiales, que al igual que las estadísticas económicas se encuentran cuestionadas por especialistas, que aseguran que la magnitud de contagiados y muertos es mayor que la difundida por el Gobierno.

Tras el pánico de la semana pasada, cuando se agotaron los inventarios de mascarillas y alcohol en gel, la población se está acostumbrando a tomar medidas de higiene para evitar el contagio, como el lavado regular de las manos.

El ministro señaló que "todo paciente con infección respiratoria aguda grave recibirá medicamentos antivirales" y confirmó que se le iniciará tratamiento a los grupos de riesgo a las 48 horas de iniciados los síntomas.

Los medios argentinos muestran cada vez más publicidad oficial explicando cómo prevenir el contagio, las cadenas de correo electrónico con consejos sobre la enfermedad se multiplican y la ausencia de público en los teatros llevó el lunes al sector a suspender por 10 días todas las obras.

La suspensión busca que "todos podamos recuperar la sensatez y la calma de forma tal que el público pueda volver a disfrutar de sus artistas", dijo Carlos Rottemberg, titular de la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales (AADET), quien aseguró que la asistencia del público cayó 80 por ciento.

No obstante, el ministro Manzur dijo que oficialmente no se recomendaba el cierre de lugares públicos. "La experiencia mundial no recomienda el cierre preventivo de actividades sociales", afirmó.

Las medidas oficiales abarcaron la suspensión de clases, de la actividad judicial y la licencia para embarazadas en empresas y el sector público, entre otras.